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Al detective y su novia de Maracay los desmebraron por un fusil

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Detective acn
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El Cicpc estableció que al detective de Maracay y su prometida cuyos cuerpos localizaron descuartizados en Barinas, perecieron durante la venta de un fusil de asalto.

Cinco policías y seis delincuentes fueron los carniceros que los aguardaban. La primera en sospechar en un desenlace trágico fue la madre Alba Yearling Tiapa Méndez, novia del funcionario Leyrri Osmar Bauter Ramírez. Conversó con su hija por teléfono y le notificó que pronto regresaría a la capital aragüeña.

Al día siguiente frente a la imposibilidad de contactarla de nuevo, acudió ante el Cicpc para denunciar su desaparición. En pasillos policiales se conoció que el Bauter y su noviallevaban consigo un Fusil, modelo AR15, el cual pretendían en el submundo criminal.

Para concretar el “negocio” un compañero del investigador adscrito a la Base de Homicidios de Aragua, le prestó un auto. La pareja viajaba en un vehículo marca Fiat, modelo Siena, color gris, placas AD895LV. La venta del arma nunca se llegó a materializar y desde entonces se les perdió el rastro a los novios. Durante seis días los buscaron.

Fusil mortal

Sin embargo, el 20 de noviembre moradores del río Masparro, del municipio Alberto Arvelo Torrealba de Barinas, hallaron un torso. Por las características las autoridades sospechaban que se trataba de una mujer.

Un día después mientras los bomberos intentaban localizar las extremidades y la cabeza, a 20 metros se toparon con otro tronco de sexo masculino. Las inspecciones oculares preliminares hacían presumir que se trataba de una pareja que descuartizaron de la manera más brutal. Los restos fueron ubicados en el tramo que conduce a la finca La Lucha, a orillas del río, parroquia Rodríguez Domínguez.

Al vampiresco escenario llegaron detectives del Cicpc y horas más tarde la institución se hundía en estupor. Determinaron que al detective Bauter y su novia Alba los desmembraron para borrar evidencias y dificultar las investigaciones. Al menos eso creyeron los asesinos.

Las pesquisas iniciales comenzaron como lo sugiere el manual básico del criminalista. Los radares de la consternada institución policial se dirigieron hacia el entorno de la pareja. Y el primer sospechoso estaba a la vista de todos.Interrogaron al funcionario que le facilitó el Fiat Siena al detective.

Policías y carniceros

La segunda línea de la investigación se encargó de indagar las llamadas telefónicas y mensajes de texto que Bauter realizó. Horas más tarde los funcionariosinterrogaban a cuatro detectives del Cicpc, adscritos a la Subdelegación Babaneta de Barinas. También arrestaron a un Oficial Jefe de PoliBarinas.

Sus declaraciones permitieron identificar a los antisociales Jaider Anderson Albornoz Peña y Omar Orlando Bedoya Escobar. También mencionaron a Víctor Alexis Ramírez González, José David Paredes Ramírez y un hampón conocido Leo el Carnicero. Los tres primeros fueron dados de baja en Los Mangos y La Queveda del municipio Ezequiel Zamora. Los dos últimos están en fuga.

Una jauría de investigadores del Cicpc se encargará de ellos. Todos los imputados forman parte de una banda mixta compuesta por policías y delincuentes. El Cicpc intenta localizar el Fusil AR15, marca Colt, modelo SP1, calibre 223.

En los calabozos y a buen resguardo se encuentran detenidos los detectives Carlos Méndez, Javier Vergara, Damián Silva, Nelson Borges y el Oficial Jefe de PoliBarinas Ramón Ramos. Se les imputa como autores intelectuales del brutal doble homicidio. Delataron al detective antes que llegara a Barinas para ellos quedarse con el fusil. En sus andanzas nutrían de armas de fuego a las bandas criminales de la región llanera.

Respecto a las bestiales muertes que mantienen conmocionado al Cicpc, su director el comisario Douglas Rico, ordenó la intervención de la Delegación Barinas. El jefe policial dijo que se había comprobado de manera científica la complicidad de funcionarios en el doble homicidio. “Todos los responsables serán  puestos a la orden del Ministerio Público. No tendremos contemplación”, acotó.

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Pena máxima a peruano por violencia sexual contra seis adolescentes en Miranda

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Pena máxima a peruano por violencia sexual - Agencia Carabobeña de Noticias
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Pena máxima a peruano por violencia sexual, ante la contundencia de las pruebas presentadas por el Ministerio Público.

José Manuel Prado Amasifuén (45), de nacionalidad peruana recibió sentencia a 30 años de cárcel. Por su responsabilidad en la violencia sexual contra seis adolescentes entre 15 y 17 años de edad.

Tal situación, denunciada en el año 2006 por la madre de una de las víctimas de 16 años de edad, ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) en el municipio Guaicaipuro; capital del estado Miranda.

Una vez en el lugar manifestó que en octubre de ese año su hija se encontraba por las adyacencias de la Plaza Guaicaipuro, cuando la abordó el hoy condenado ofreciéndole empleo.

Pena máxima a peruano por violencia sexual de seis adolescentes

Seguidamente, la víctima accedió a la entrevista de trabajo y se fue con el comerciante hacia el restaurante de un hotel de la localidad. Al ingresar, le ofreció un refresco y luego la invitó a una de las habitaciones. Al notar algo extraño, la víctima intentó escapar, pero el agresor la sujetó fuertemente y la lanzó a la cama para luego abusarla sexualmente.

Tras la denuncia de la primera víctima, los oficiales iniciaron las labores de investigación con el retrato hablado que suministró la joven de 16 años.

Otras cinco denuncias

Posteriormente, fueron interpuesta cinco denuncias con el mismo modus operandi. Pero en algunos de los casos las víctimas fueron despojadas de sus teléfonos y golpeadas por Prado Amasifuén.

En función de los elementos recabados, se determinó que las características físicas del solicitado correspondían con las de una persona detenida previamente por la comisión de un robo.

Durante el juicio, la Fiscalía 12ª del estado Miranda ratificó la acusación contra el hoy condenado por los delitos de violencia sexual agravada y violación agravada.

Una vez evaluados los medios y órganos de prueba expuestos por la representación fiscal, el Tribunal 2º de Juicio de la referida jurisdicción dictó la referida condena contra Prado Amasifuén. Ahora cumplirá la pena en el Centro de Formación del Hombre Nuevo “Simón Bolívar”, ubicado en la parroquia El Paraíso.

ACN/MAS/MP

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