Los carteles mexicanos y colombianos de las drogas andan detrás del fugitivo expresidente de Bolovia, Evo Morales para ajustarles las cuentas.

En su país también lo busca la justicia ordinaria para juzgarlo por narcotráfico y otra serie de delitos. La presidenta provisional de Bolivia, Jeanine Áñez, anunció una inminente orden de aprehensión contra el exmandatario. Morales también vinculado con el régimen chavista se encuentra en Argentina donde le dieron cobijo. Primero estuvo en México, después en Cuba y de allí voló a Buenos Aires.

Al izquierdista Morales también lo investigan por sedición y terrorismo. Durante su mandato la producción de cocaína se multiplicó en Bolivia.

“En los próximos días se va a emitir una orden de aprehensión porque nosotros hemos hecho las denuncias pertinentes”, declaró Áñez.  “Él nunca ha respetado nada. Ni la propia Constitución. Si vuelve a Bolivia sabe que tiene que darle respuestas al país. Tiene cuentas pendientes con la justicia”.

Evo Morales renunció el pasado 10 de noviembre, después de dos semanas de protestas tras los cuestionados resultados de unas elecciones generales. Su salida del poder se vio forzada cuando las fuerzas armadas le retiraron su apoyo. Los carteles mexicanos y colombianos lo consideran un delator. Las autoridades sostienen que le enemistad de Evo con los carteles nació luego de un tumbe de drogas.

Carteles se la juraron a Evo Morales

Distintos dirigentes chavistas también son investigados en estados Unidos por narcotráfico y lavado de dinero. Morales niega ser un narcotraficante. Durante su gestión se brindó un apoyo irrestricto a los llamados cocaleros.

Investigacioens que se adelantan en Estados Unidos y Bolivia vinculan a Evo Morales con carteles mexicanos de las drogas. El sábado su primera aparición pública en Buenos Aires, desde que el Gobierno de Alberto Fernández le concedió el asilo político con el que llegó al país el jueves pasado.

Se hacía pasar como socialista. Las investigaciones que se adelantan refiere que el dinero lo mantiene a nombre de testaferros. El México temía por su vida. Los narteles podrían tomar represalias en su contra. Mantuvo nexos públicos con dirigentes chavistas. Incluso solía visitar con frecuencia a Venezuela.

En el año 2008 el fallecido Hugo Chávez masticó en público unas horas de coca que según él le había enviado Evo Morales. En esa época todos rieron, pero ningún organismo venezolano investigó a Chávez ni a Evo Morales.

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